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Imprimir los contenidos de Internet costaría 6.600 millones de euros

Imprimir los contenidos de Internet costaría 6.600 millones de euros

Muchos son los cambios que ha introducido Internet en el mundo cotidiano de los consumidores. Uno de los más interesantes son la cantidad de documentos a los que podemos acceder a través de la nube, los cuales son intangibles pero, ¿también inaccesibles a su contabilidad?

En absoluto, de hecho dos son los estudiantes de la Universidad de Leicester, en el Reino Unido, que han calculado la cantidad de contenidos que existen en la red de redes, cómo se podrían imprimir y cuál sería su coste final.

En concreto, los más curiosos seguro que se llevan las manos a la cabeza a la hora de conocer la cifra exacta. Y es que se requerirían 16 millones de árboles para imprimir la totalidad de la galaxia Guttemberg, perdón, de Internet. Asimismo, se ha calculado que se necesitarían 136.000 millones de hojas de papel tamaño A4 para obtener en papel todo lo que está acumulado en Internet.

En este sentido, los dos integrantes de la universidad de esta ciudad británica han extrapolado el dato de cuántas hojas serían necesarias para imprimir la Wikipedia íntegra a la web entera. Estos jóvenes de nombre George Harwood y Evangeline Walker iniciaron su investigación basándose en el dato que se obtiene de esta fuente.

El mismo sostiene que son setenta mil millones de hojas deImprimir los contenidos de Internet costaría 6.600 millones de euros papel los que se obtienen de la impresión de la Wikipedia íntegra. Del mismo modo han analizado la cantidad de millones de páginas web que existen en la red de redes en la actualidad, cifra a partir de la cual han calculado tanto el papel total que haría falta para llevar a cabo esta iniciativa como el resultado monetario de la misma.

En este sentido, de un cálculo rápido de la misma se desprende que todos los documentos que existen en Internet pueden ser impresos en 136.000 millones de hojas de papel de tamaño A4. Para ello, además, sería necesario talar un total de 16 millones de árboles de modo que, apilados, traerían como resultado una columna de una altura de 13.350 kilómetros.

En paralelo, los expertos extraen una limitación a este estudio, cuyo problema principal se sitúa en la tinta que se requiere para llevar a cabo esta proeza, la cual es “enorme, pero no inabarcable”, según señalan sus propios responsables. En este sentido, seria difícil contar con 300 millones de cartuchos, los necesarios para imprimir tal cantidad de documentos, y partiendo de la base de que este producto viene envasado en cartuchos de ocho milímetros, cuyo rendimiento a nivel individual es de 455 páginas.

De igual modo, también se ha calculado la inviabilidad económica del proyecto ya que, si de media, esta tiene un coste de alrededor de 22 euros, para imprimir Internet entorno habría que tener en cuenta su coste, calculado en más de 6.600 millones de euros. Calderilla para Amancio Ortega pero una cifra inalcanzable para el grueso de la totalidad de los mortales.

Pero, ¿cómo se ha logrado que en el mundo existan tantas páginas web? ¿A partir de qué herramientas se han multiplicado? ¿Cuáles son los elementos sobre los que más se incide en la red de redes?

Solo hace echar un vistazo, en este sentido, a la capacidad de creación que en los últimos tiempos han generado tanto las redes sociales como los dispositivos móviles. Así, las características de Facebook, que llega a casi 1.500 millones de usuarios, han facilitado la generación de páginas web, debido a la capacidad de difusión de esta plataforma. A ella hay que sumar otras redes sociales menos hegemónicas pero también importantes, como Twitter o Google+, Pinterest, las cuales fomentan la construcción de páginas web a través de la difusión de los catálogos y contenidos de las marcas y de las empresas en ellas.

Un solo botón de los motivos por los que el incremento de la red de redes y sus contenidos a través de las páginas web no hace sino continuar. Y dar más motivos a los investigadores para seguir trabajando a favor de este tipo de utilidades.

Manuel Garrido

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